Lugares de interés

Son varios los lugares de interés que ofrece el municipio de As Somozas, tanto desde el punto de vista medioambiental como paisajístico o cultural.

Área de recreo situada en el entorno del núcleo de A Iglesia, en un espacio natural creado artificialmente con la construcción de puentes de madera o pequeños diques para el río. Está equipada con mesas y mobiliario en perfecta armonía con el medio natural. En las inmediaciones existen parques infantiles con mobiliario de madera y piscina descubierta. Ideal para merendar y darse un baño en un acogedor y tranquilo ambiente natural.
Área de recreo situada en un entorno forestal y fluvial, en las inmediaciones del río Mera, en un espacio natural de singulares características ecológicas, densa vegetación de pinos, eucaliptos, robles y abedules que cobijan al visitante, en perfecta armonía con el medio natural.En el lugar existe un molino restaurado de piedra y cubierta de pizarra.
Se localiza en el núcleo de A Garita y se trata de una edificación construida a principios del siglo XX por los emigrantes a Cuba para poder ofrecer a los habitantes de As Somozas una correcta enseñanza. Se trata de un edificio sin estilo definido y que cumplió funciones de escuela hasta la Guerra Civil. Consta de una planta cuadrangular, sobre la que se levantan dos pisos. Los muros de cachotería están recebados. La cubierta, a dos aguas, presenta cubierta de pizarra y en un futuro se llevará a cabo su restauración.
Se trata de un cruceiro levantado a principios del siglo XX, probablemente por Antón Rodríguez “O Quinto”, a devoción de Manuel Casal y Carmen Martínez . Con pedestal elevado y bien trabajado, fuste corto y remate con elegante capitel. Decoración con ángeles de medio cuerpo y actitud orante en las cuatro caras. Cruz de palos cilíndricos, con un Cristo muy despegado y la tradicional imagen mariana. Perteneciente a un antiguo Vía-Crucis que circunda al atrio de la iglesia parroquial de Santiago Seré.
Cruceiro levantado a principios del siglo XX, sobre un pedestal de base cuadrada. Fuste de sección octogonal. Cruz con relieve en el anverso de Cristo crucificado y la Virgen mariana en el reverso. Se puede leer la inscripción: “Se yzo a la devoción de Don Pedro VII Aboy Ardao”.
Cruceiro sobre pedestal de base cuadrada, con la inscripción ” Limosna a San Antonio de Padua”. El fuste, corto y de sección octogonal, remata con una cruz sencilla, un relieve de Cristo crucificado y las siglas INRI en la parte superior.
Sencillo cruceiro de finales del siglo XIX (1896). Sin pedestal, con fuste corto y de sección octogonal, presenta un remate con capitel, decorado con motivos vegetales. En la cruz, de palos cilíndricos, aparece el Cristo crucificado en el anverso y la tradicional imagen mariana en el reverso. Interesante muestra del patrimonio popular.
Cruceiro levantado a principios del siglo XX (1904). Se trata de una pieza bien trabajada y montada sobre una plataforma con escaleras de apreciable altura. La caracterizan, además del pedestal elevado, el fuste corto y el remate con capitel y cruz sencilla. Se pueden leer las siguientes inscripciones advocatorias: “Culto al Sagrado Corazón de Jesús” y “40 días de indulgencia rezando alguna oración delante de esta imagen”. Debajo del Cristo, se halla una fuente de agua natural, se entiende que purificada por el cruceiro.
Pequeña iglesia en entorno rural, sin estilo definido. Planta rectangular, con única nave y presbiterio que sobresale del volumen principal. En el exterior, cubierta de pizarra a dos aguas. Estructura volumétrica simple. Muros con cachotería a la vista. Fachada principal con puerta rectangular adintelada. Espadaña de un solo hueco.
Pequeña iglesia de tipología popular, sin estilo definido, aunque con un modelo arquitectónico muy repetido en la comarca a comienzos del siglo XX. Planta rectangular, con única nave y presbiterio. En el exterior, cubierta de pizarra a dos aguas. Volumetría sencilla, con ligera elevación del presbiterio. Muros con cachotería a la vista. Fachada principal con puerta rectangular adintelada. Espadaña de un solo hueco. En su interior se venera a San Marcos.
Pequeña iglesia en entorno rural, de estilo ecléctico. Planta de cruz rectangular, con única nave. En el interior, espacio entre presbiterio y nave delimitado por arco apuntado, apoyado sobre pilastras y estructura aérea abovedada y de madera. En el exterior, volumetría sencilla y muros de carga. Cubierta de pizarra a dos aguas. Fachada principal dividida en tres paños, rematados en arcos apuntados, correspondiendo el mayor a la puerta de entrada, sobre ella, hornacina con imagen pétrea de San Roque, representado con sus característicos atributos. Capilla de advocación popular a “San Roquiño do Camiño”.
Iglesia de pequeñas dimensiones. Planta rectangular, con nave única y presbiterio sobresaliente. En el exterior, cubierta de pizarra a dos aguas. Volumetría simple. Muros con cachotería a la vista. Fachada principal con puerta rectangular adintelada. Espadaña de un solo hueco.
Minúscula iglesia rural, sin estilo definido, y recientemente restaurada. Planta rectangular, con única nave y presbiterio. En el exterior, cubierta de pizarra a dos aguas. Volumetría sencilla, con ligera elevación del presbiterio. Muros de mampostería con piedra a la vista. Fachada principal simétrica, puerta rectangular y adintelada con molduras curvas y placa con inscripción encima (“se edificó por Pedro Martínez Anidos. Año 1903”). Se superpone una pequeña ventana que permite la entrada de luz al interior del templo. Corona la fachada una sencillísima espadaña rematada en frontón triangular.
Pequeña iglesia en entorno rural, sin estilo definido, dedicada a “Nuestra Señora del Socorro”. Planta rectangular, con única nave y presbiterio elevado. En el exterior, cubierta de pizarra a dos aguas en la parte de la nave y a cuatro en el presbiterio. Volumetría sencilla. Muros con cachotería a la vista exceptuando la fachada principal, revestida y caleada. Fachada principal con sistema pentagonal, puerta rectangular y adintelada en el eje vertical. Cornisa interrumpida por pequeña espadaña de características neogóticas. Destaca un pequeño pórtico en la entrada, con dos bancos de piedra.
Pequeña iglesia en entorno rural. Planta rectangular, con única nave y presbiterio. En el exterior, cubierta de pizarra a dos aguas. Volumetría sencilla, con ligera elevación del presbiterio. Muros con cachotería a la vista. Fachada principal con sistema pentagonal, puerta rectangular y adintelada en el eje vertical. Espadaña de un solo hueco.
Casa sin estilo definido, aunque responde a una tipología popular muy difundida. Planta rectangular, con cuerpos añadidos dedicados a dependencias utilitarias, como cuadras o alpendres. Consta de dos pisos y tres entradas, una principal, en el centro de la fachada, y dos de carácter secundario, que vinculan la casa con los anexos. Combina muros de cachotería a la vista y muros pintados, sin uniformidad en la fábrica. Cubiertas de lajas de pizarra a cuatro aguas en el cuerpo principal y a dos y una en los añadidos.Como elementos decorativos destacan los vierteaguas de las ventanas y los pináculos de piedra que coronan la cubierta. La casa tiene asociada una leyenda, explicativa, además, de la toponimia. Según la “Historia del Apóstol Santiago”, publicada en Madrid a comienzos del siglo XVI, el topónimo de Somozas se debía a un noble francés, de nombre “Sumaça”, quien había huido de Francia y recibido estos dominios de los reyes de España. Cuenta la leyenda que este caballero galo libró al valle del bochornoso tributo de las 100 doncellas que los moros llevaban a sus harenes, tras vencer en una batalla que tuvo lugar en Melide. La casa sería el lugar en el cual se “enchousaban” (encerraban) las mujeres antes de embarcar. Desde el monte próximo, “el marbán” (por el mar van), se divisarían los veleros que las transportaban a África.
Iglesia del siglo XVIII, de estilo barroco. Planta rectangular, con tres naves. En el interior, nave central con bóveda rebajada de madera, abierta al lateral con arcos de medio punto apoyados sobre pilares de sección cuadrada. Las naves laterales, con sencilla cubrición de madera, abierta con huecos abocinados que proporciona luz natural al templo. Coro alto, realizado con forjado de madera. En el exterior, muros revestidos y blanqueados exceptuando los esquinales. Fachada principal, organizada en tres cuerpos, con primacía de la central sobre los laterales. El campanario, de importantes dimensiones y coronado por cúpula octogonal rematada con pináculo y cruz de hierro. Destacan en la parte posterior de los muros del presbiterio los jabalíes y escudos, símbolos de la familia de los Andrade, señores medievales de la comarca.
Iglesia de estilo gótico. Planta rectangular, con única nave y pequeña capilla. En el interior, nave con muros desnudos y apenas decoración. Capilla con dos estancias, con bóveda de crucería de una sola clave, separadas por arco triunfal apuntado. Altar presidido por retablo de características neoclásicas y policromía semejante al mármol, con imagen central de San Pedro y en los laterales San Xosé y San Antonio. Según se recoge en la inscripción del muro meridional, la capilla fue propiedad de la Marquesa de Cavalcanti. En el exterior, muros de carga con cubierta a dos aguas de pizarra irregular.
Iglesia de estilo barroco clasicista. Planta de cruz latina, con única nave, dos capillas laterales, presbiterio y pequeña sacristía. En el interior, nave cubierta con bóveda rebajada de madera y crucero con bóveda de arista. Presbiterio, de pequeñas dimensiones, delimitado por arco de medio punto rebajado y apoyado sobre pilastras. En el exterior, muros revestidos y blanqueados exceptuando los esquinales. Fachada principal, dividida en tres paños, con cornisa dividida en su centro, para dar lugar a una base rectangular sobre la que se asienta la espadaña de dos huecos. Posee crucero en la entrada.
Iglesia de estilo barroco. Planta rectangular, con tres naves. En el interior, nave central con bóveda a dos aguas de madera, abierta al lateral con arcos de medio punto apoyados sobre pilares de poca altura. Las naves laterales, con sobria cubrición de madera. Coro alto, realizado con forjado de madera. Presbiterio, de pequeñas dimensiones, con estructura aérea de madera, que reproduce las cuatro aguas de cubierta exterior. En el exterior, muros revestidos y blanqueados exceptuando los esquinales. Rica volumetría, con diferenciación de cada uno de los cuerpos. Sobria fachada principal. Gran campanario, coronado por cúpula octogonal rematada con pináculo y cruz de hierro.
Actualmente se encuentra en un estado de abandono, del que tan sólo se conservan algunos restos de las piezas interiores, así como sus muros exteriores. Se trata de un artilugio utilizado antiguamente por los herreros para trabajar el hierro y confeccionar diferentes artículos, muchos de los cuales eran posteriormente comercializados en diferentes ferias y mercados de la comarca. Uno de los elementos necesarios para su conservación, la balsa, en donde se almacenaba el agua para hacer posible su funcionamiento, ha desaparecido.
Mámoa circular emplazada en la ladera del monte Marbán, en la cumbre, con ausencia de datos cronológicos. Compuesto por dos murallas, entre las cuales se sucede un antecastro y foso.

Galería

 

Turismo en As Somozas

As Somozas dispone de lugares llenos de historia y de vida para que sus visitantes disfruten de la calma que nos otorgan nuestros antepasados. La naturaleza rebosa por todos aquellos lugares que se visiten, y en As Somozas, podrá disfrutar de los mejores lugares para comer y descansar.